Difícilmente los musulmanes adoptan una cultura distinta a la de ellos y la tendencia de las ciudades es la de adaptarse a sus costumbres y tradiciones, despreciando incluso las propias.
Difícilmente los musulmanes adoptan una cultura distinta a la de ellos y la tendencia de las ciudades es la de adaptarse a sus costumbres y tradiciones, despreciando incluso las propias.